Elegir el ancho correcto del andador es esencial para la comodidad, la estabilidad y la movilidad. Los andadores estándar suelen tener entre 25 y 29 pulgadas de ancho, lo que brinda un fuerte apoyo a los usuarios con problemas de equilibrio. Los andadores livianos, de 22 a 24 pulgadas, ofrecen una mejor maniobrabilidad en espacios reducidos, pero pueden carecer de estabilidad. Los andadores estrechos son ideales para salas de estar pequeñas, mientras que los modelos más anchos son más adecuados para quienes necesitan apoyo adicional. Al seleccionar un andador, considere factores como el ancho, la capacidad de peso, la altura del mango y los entornos específicos en los que lo usará. Las mediciones precisas de puertas y pasillos también son cruciales para un ajuste adecuado.